Si tienes diabetes y bebes alcohol, es especialmente importante que lo hagas de forma moderada. Aquí tienes cuatro efectos de la bebida que debes tener en cuenta.

¿Tener diabetes significa no poder disfrutar de una copa de vino con la cena o de una cerveza con los amigos? No necesariamente. El consumo moderado de alcohol puede incluso reducir el riesgo de complicaciones cardíacas y renales.
Sin embargo, beber demasiado puede acarrear problemas graves, como un nivel peligrosamente bajo de glucosa en la sangre e interacciones perjudiciales con la medicación para la diabetes. Ten en cuenta estos efectos.
En un estudio publicado en Diabetes Care participaron más de 11,000 personas con diabetes tipo 2 de 20 países. Todos tenían al menos 55 años y padecían una enfermedad cardíaca o un factor de riesgo cardíaco, además de diabetes. Cuando se inició el estudio, los participantes comunicaron cuánto alcohol bebían durante una semana normal. Durante los cinco años siguientes, los que dijeron que bebían alcohol con moderación tenían menos riesgo de sufrir infartos de miocardio, accidentes cerebrovasculares y muerte prematura que los que se abstuvieron por completo.
Otros estudios han demostrado que el consumo moderado de alcohol se asocia a un menor riesgo de niveles de colesterol no saludables y enfermedades renales en personas con diabetes. La palabra clave es moderado. No más de dos copas al día para los hombres y una para las mujeres. Beber en exceso puede causar muchos problemas de salud, como hipertensión, daños hepáticos y varios tipos de cáncer.
Cuando se tiene diabetes, el consumo de alcohol puede provocar hipoglucemia, es decir, un nivel anormalmente bajo de glucosa en sangre. Para evitarlo, no beba alcohol con el estómago vacío o cuando su nivel de glucosa en la sangre no esté controlado. Para mayor seguridad, tu médico puede recomendarte que midas el nivel de glucosa antes, durante y después de beber.
Mezclar alcohol con pastillas para la diabetes puede aumentar el riesgo de efectos secundarios perjudiciales:
Si toma sulfonilureas, que ayudan al páncreas a producir más insulina, es más probable que el alcohol le provoque hipoglucemia. Algunos ejemplos de sulfonilureas son la clorpropamida (Diabinese), la glipizida (Glucotrol) y la gliburida (DiaBeta, Glynase, Micronase).
La combinación de sulfonilureas y alcohol provoca ocasionalmente sofocos, náuseas, vómitos, dolor de cabeza, taquicardia o cambios bruscos de la tensión arterial.
La combinación del medicamento metformina (Glucophage) con alcohol aumenta el riesgo de desarrollar acidosis láctica. Este efecto secundario, poco frecuente pero muy grave, puede causar debilidad, cansancio, mareos, escalofríos, dificultad para respirar, dolor muscular, problemas estomacales y cambios repentinos de la frecuencia o el ritmo cardíaco.
Sé sincero con tu médico sobre la cantidad de alcohol que bebes, porque eso podría afectar a la medicación para la diabetes estás utilizando. Esto también se aplica a las decisiones clínicas relativas a los nuevos medicamentos inyectables sin insulina para la diabetes. Habla de los posibles efectos secundarios. Pregunta a qué debes estar atento y cómo reaccionar si se produce una complicación.
Abusar del alcohol puede debilitar tu decisión de tomar decisiones saludables. En un estudio de más de 3,900 hombres con diabetes, los que abusaban del alcohol eran menos propensos a seguir un plan de comidas y más propensos a fumar que los no bebedores.
En otros estudios sobre personas con diabetes, las personas que bebían con más frecuencia eran menos propensas a medirse sistemáticamente la glucosa en la sangre, tomar la medicación para la diabetes, hacerse pruebas de A1c y hacer ejercicio. Este es uno de los motivos por los que las personas con diabetes que beben con frecuencia suelen tener mayores problemas para controlar sus niveles de glucosa.
Si necesitas ayuda para reducir el consumo de alcohol, habla con tu médico para crear un plan que se ajuste a tu tratamiento y estilo de vida. El Instituto Nacional Sobre el Abuso del Alcohol y el Alcoholismo tiene un recurso digital con información importante.
Datos importantes:
- El consumo moderado de alcohol puede tener beneficios para la salud de las personas con diabetes, como un menor riesgo de infarto de miocardio y accidente cerebrovascular.
- Beber alcohol puede provocar hipoglucemia, es decir, un nivel anormalmente bajo de glucosa en la sangre. No bebas con el estómago vacío ni cuando la glucemia no esté controlada.
- Mezclar alcohol con pastillas para la diabetes puede aumentar el riesgo de efectos secundarios perjudiciales.
- Abusar del alcohol puede debilitar tu determinación de seguir tu plan de comidas, tomar tu medicación y tomar otras decisiones saludables.